Los Hispanos y las Guerreras se encuentran desde ayer por la tarde en Tarragona, lugar en el que arrancará mañana la competición de Balonmano en los XVIII Juegos del Mediterráneo. Ambas selecciones ejercerán como anfitrionas en un torneo en el que tanto el combinado masculino como el femenino aspiran a conquistar territorio tarraconense y regresar con una medalla colgada al cuello.
La expedición española viajó ayer desde Madrid hasta Tarragona para concentrarse en las dos jornadas previas al inicio de la competición. Una vez instalados, Hispanos y Guerreras se han ejercitado esta mañana por primera vez en la localidad catalana, ultimando preparativos para el debut del sábado.
Los 32 jugadores y jugadoras que representarán a España en los XVIII Juegos del Mediterráneo llegan a Tarragona en plena forma, disponibles para sus respectivos seleccionadores y con la intención de dar el máximo de su nivel para alcanzar las cotas más altas en la cita olímpica de la cuenca mediterránea.
El conjunto de Jordi Ribera jugará su primer encuentro en el Palau d'Esports Campclar de Tarragona, y lo hará mañana (20:30 h.) frente a Grecia. El combinado heleno será el primero de los dos rivales a los que se enfrentará España en la fase de grupos: el otro será Portugal, disputando así un duelo ibérico en el que se decidirá el puesto en el que los Hispanos pasarán a los cuartos de final del próximo miércoles.
Por su parte, el equipo de Carlos Viver debutará este sábado (18:00 h.) ante Eslovenia, a priori el rival más duro de un grupo en el que las Guerreras tendrán que jugar también contra Grecia, Portugal e Italia. El objetivo, lograr una de las dos plazas que dan acceso a las semifinales del próximo viernes, lo que metería de lleno a la selección española en la lucha por las medallas en estos XVIII Juegos del Mediterráneo.