Esta tarde (18:00 h.) se disputa el primer acto de la final de la Recopa de Europa masculina, en la que el balonmano español estará representado por el Fraikin Bm. Granollers, que se ha colado en esta lucha por un título continental con la solvencia de un equipo con ambición que quiere reescribir una página de oro en su brillante historia.
Los vallesanos, club ejemplar de nuestro deporte, siempre han sabido conjugar el sobresaliente trabajo de cantera (el próximo fin de semana el conjunto juvenil masculino disputa la final del Campeonato de España), con la élite de su equipo sénior, primer conjunto español en alzar un título continental (Recopa de 1976).
Y ahora tienen ante sí una oportunidad de oro para engordar un palmarés brillante si conjugamos sus éxitos y el potencial económico respecto a sus rivales.
Los de Lorenzo Rueda tendrán el escollo de jugar en Alemania, siempre territorio hostil, ante un equipo sólido, rocoso, caracterizado por la potencia de una defensa compacta y dura, el Gummersbach.
Los germanos, sextos de la Bundesliga, ya eliminaron en semifinales al San Antonio Reyno de Navarra, pero su engañosa posición en la competición doméstica no puede ocultar que los pupilos del croata Hasanefendic han logrado ganar a los dos grandes titanes Hamburgo y Kiel.
El encuentro será dirigido por la pareja polaca Arkadiusz Solodko y Leszek Solodko. La vuelta, el partido decisivo, el jueves a las 21:00 h. en el Palau d'Esports de Granollers