Dentro de un fin de semana tan intenso como éste, en el que se disputan las dos Supercopas, Asobal y ABF, y la fase de clasificación para la Liga de Campeones masculina que se disputa en León, con la participación del Reale Ademar, los árbitros de División de Honor “E” (Asobal), tienen en Barcelona el curso de la temporada, en jornadas de sábado y domingo.
Bajo la dirección del presidente del Comité Técnico Arbitral, Rodrigo Costas, y la coordinación de José Luis Argüello, secretario del Comité, el curso abarca las siguientes ponencias y jornadas de trabajo.
• Charla-coloquio con los delegados de Asobal – Ramón Iniesta
• Programas informáticos de montaje de vídeos y análisis de las dificultades perceptivas y de decisión en la aplicación de las reglas de juego – Juan Oliver
• Operatividad administrativa – José Luis Argüello
• Situación en 6 metros, video test y test de reglamento - Tono Huelin
• Pruebas físicas (Course Navette) y complementos – Vicente Breto
• Criterios valoración actuación arbitral y relación árbitros con su entorno – Vicente Breto
• Progresividad, falta en ataque, 7 metros, acciones tipo Hollywood y cooperación-concentración arbitral – Ramón Gallego
El Plan de Formación Arbitral (PFA) es el libro de ruta
Rodrigo Costas, presidente del Comité Técnico de Árbitros, afirma que “he recibido multitud de correos y mensajes de los asistentes al curso de División de Honor Plata, manifestándonos su felicitación por los contenidos y dinámica del curso, calificándolo de excepcional. Lo cierto”, prosigue, “es que difícilmente puede encontrarse en ningún país del mundo un abanico de ponentes de la calidad de nuestro curso, árbitros que han pitado muchas finales, técnicos de prestigio mundial,… es todo un orgullo”.
“El primer curso fue muy estresante en cuanto al tiempo, ya que entre charla y charla había poco margen, pero los árbitros están acostumbrados a trabajar bajo presión y estrés, ya que no hay mayor tensión que llegar al último minuto con un marcador empatado. Por eso también quiero agradecer y felicitar a todos los asistentes, incluidos delegados y observadores por su labor encomiable y una inestimable colaboración”, matiza Costas.
El C.T.A. aboga por dar mucha relevancia a su “libro de ruta” para presente y futuro, el Plan de Formación Arbitral, conocido ya entre el colectivo como el PFA, un documento consensuado que describe las líneas maestras marcadas por el Comité, de cara a buscar la uniformidad de criterios en la aplicación del reglamento en las diferentes competiciones.
“El arbitraje español debe tener su estilo”
“Este documento es fundamental”, afirma Rodrigo Costas, “ya que desde el preámbulo se exponen los conceptos básicos a tener en cuenta y su aplicación, conscientes que es un documento abierto, que se deberá completar con los trabajos de vídeos de los propios árbitros que refrenden cada concepto. Debe ser una enciclopedia con imágenes sobre la aplicación del reglamento. El arbitraje español debe tener su estilo propio y debe basarse en un trabajo constante, del mismo modo que jugadores y entrenadores lo hacen en sus equipos”.
En la actualidad este PFA ya está en poder del colectivo arbitral, y en las próximas fechas se distribuirá también a Federaciones Territoriales, Clubes, Asociaciones,… para que todos los agentes del balonmano tengan equidad de criterios.
“Además pretendemos desde el C.T.A. que cada árbitro se haga su propio PFA con imágenes de sus partidos, para que los responsables de formación tengan más argumentos para valorar las actuaciones arbitrales”, sentencia el presidente del C.T.A.
En la actualidad hay 3 responsables de formación para División de Honor, 3 para la Plata, 3 para Primera Nacional y 1 para árbitros jóvenes.
Una de las figuras que quiere potenciar el C.T.A. es el observador arbitral, “ya que debe ser una figura clave en la valoración y colaboración con el propio arbitro. Queremos mejorar y desde el C.T.A. tenemos la inquietud de poder ofrecer el mejor espectáculo posible, algo que depende de una buena interpretación de las reglas de juego. Si mejoramos el espectáculo, tendremos más posibilidades de captar más espectadores y, obviamente más árbitros”, concluye Costas, “una empresa que fabrique coches que no gusten a la gente, cerrará, y nosotros lo que queremos es atraer cada vez a más gente ofreciéndoles un espectáculo a su gusto”.
