La semana pasada se conocía el cambio en la presidencia del Comité Técnico de Árbitros de la Real Federación Española de Balonmano, ahora liderado por Miguel Ángel Valero, además de otra magnífica noticia como es el aterrizaje de Ángel Sabroso en el cargo de director técnico, una vez ya retirado de las canchas.
El cambio, sobre el papel, es brusco, pero el propio Ángel Sabroso reconoce que "todavía no sentí estar en esa etapa de post-arbitraje porque me gusta seguir practicando unos hábitos de vida sanos, pero sí que es verdad que he podido recuperar tiempo perdido con la familia y el trabajo".
Ángel explica que el origen de este cargo tuvo lugar en el mismo Tokio: "allí en Tokio, durante el desarrollo de los Juegos Olímpicos, el presidente Blázquez me propuso el cargo, y durante estas semanas he preparado un proyecto revisado por el propio presidente y por Miguel Ángel Valero, basado en tres puntos: la formación, el seguimiento y la evaluación".
Compañero de Óscar Raluy durante numerosos años, con su retirada el arbitraje español ha perdido a una de sus parejas más notables, pero el futuro está asegurado: "por detrás hay parejas jóvenes muy formadas, parejas femeninas, y lo más importante, llegan con ilusión y motivación, con pasión por el arbitraje".
¿Cómo es el prototipo del árbitro del futuro? Ángel Sabroso considera que "va a seguir cambiando, al final es reflejo del cambio que sufre la propia sociedad, pero al esencia no creo que vaya a cambiar nunca, los árbitros son deportistas integrales". Y el cambio, muy posiblemente, se produzca a la hora de seguir implementando las nuevas tecnologías: "en balonmano tenemos que estar orgullosos porque somos verdaderos pioneros en el uso de las nuevas tecnologías, y es algo que está permanentemente evolucionando".
La primera actividad de Ángel Sabroso como parte del Comité Técnico de Árbitros de la Real Federación Española de Balonmano va a tener lugar durante el fin de semana en Madrid, con motivo del stage de pretemporada para árbitros de Categoría Élite y División de Honor.