Tras un partido de infarto en el Pabellón El Limón de Alhaurín de la Torre, con penaltis incluidos, el Rincón Fertilidad Málaga eliminaba al Liberbank Gijón de la XLI Copa de S.M. la Reina a la vez que certificaba su pase para la gran final, donde se jugarán el trofeo de campeón precisamente en la edición en la que ejercen de anfitrionas.
Suso Gallardo, técnico del equipo costasoleño, analizaba el pase de su equipo al término del encuentro: “Hemos comenzando dominando y luego Liberbank Gijón ha metido su ritmo. Hemos tenido una grandísima defensa acompañando también el gran trabajo de la portería. Nuestro rival tiene a una de las mejores entrenadoras de la Liga y creo que hemos vivido un partido digno de una final. Ha sido un partidazo para el espectador, no apto para cardiacos”.
Por su parte, la encargada de certificar el pase a la final del Rincón Fertilidad Málaga desde los siete metros, Silvia Arderius, añadía: “Me he acordado mucho de mi hermana al lanzar los penaltis porque si llego a fallar, me lo hubiera recordado toda la vida. Ha sido un partido intenso, muy duro, y sólo puedo decir ‘chapeau’ por el equipo. Cuando lo tienes de cara con el marcador encarrilado, que te lo den la vuelta es muy complicado. Si fuera un partido de Liga, sería el típico que te diría que vale algo más que dos puntos”.
Asimismo, otra pieza fundamental del pase a la final de las anfitrionas era, una vez más, Mercedes Castellanos, que como ya hiciera en el partido de cuartos, se lucía bajo los tres palos para sostener a su equipo en los momentos más complicados. “La verdad es que he estado tranquila en la tanda, pensando sólo en tratar de parar los lanzamientos. Jugar en casa tiene la ventaja de que, aunque hay poco público por la situación, te ayudan a tirar para adelante”, señalaba.
Por su parte, la entrenadora del Liberbank Gijón, Cristina Cabeza, mostraba su satisfacción por el papel de su equipo. “Lo primero que quiero hacer es felicitar al Málaga porque creo que los dos equipos hemos hecho un partido espectacular, muy atípico para las alturas de la temporada en las que estamos. Ha habido muchas alternativas a lo largo de los 60 minutos y es complicado decir qué nos ha faltado para clasificarnos para la final. Ellas han jugado muy cómodas en la primera parte y en la segunda le hemos dado la vuelta. El partido ha acabado con un 7 metros errado por Silvia Arderius y la prórroga, igual, sólo que en este caso ha acertado. Me siento muy orgullosa de las jugadoras, que han demostrado que a pesar de no ser favoritas para jugar la final, hemos estado a un penalti de hacerlo. Liberbank Gijón va a dar mucha guerra este año”.
Una satisfacción que se extendía al resto de la plantilla del Liberbank Gijón, como afirmaba Natalia Martínez a su paso por zona mixta: “A pesar de la derrota, estoy muy contenta y orgullosa de mi equipo. Nos costó un poco entrar en el partido, pero en la segunda parte defendimos como leonas y creo que esa fue la clave para llegar donde llegamos”.
Por último, otra jugadora cuyo papel ha sido determinante en el encuentro, Raquel Álvarez, se despedía del torneo copero con el buen sabor de boca de haber ofrecido espectáculo y poner las cosas difíciles al anfitrión: “Ha sido un partido que me ha gustado mucho jugar y espero que también le haya gustado a la gente que lo ha visto. Estoy muy orgullosa de mi equipo porque nos hemos dejado todo en la pista. Al final, siempre tiene que haber un perdedor y nos ha tocado a nosotras”.
Fotografías: J. L. Recio