Los Hispanos debutan con victoria en el Campeonato de Europa de Croacia, tras imponerse (32:15, 16:9 a descanso) a una combativa selección checa, en un partido donde los de Jordi Ribera mostraban una versión muy seria.
Arrancaba el Europeo para los Hispanos con el choque ante la República Checa en el Arena Varazdin. Se ponía el balón en juego y España salía con una defensa 6:0 con Gedeón, Cañellas y Gurbindo en el centro como bastiones defensivos en los que eran los primeros minutos de los jugadores de Jordi Ribera en Croacia.
En ataque, el capitán, Raúl Entrerríos, dirigía el juego desde los primeros compases del choque, buscando la conexión con Julen Aginagalde que abría el marcador de los Hispanos desde el pivote. A los dos minutos de encuentro, una clara exclusión al jugador checo Sthelik ayudaba a los nuestros a abrir la renta, exigiéndole a los checos un gran ritmo para no sufrir la inferioridad.
El preparador del combinado rival iba a parar el tiempo a los ocho minutos tras la dificultad de los suyos de perforar la portería de Gonzalo P. de Vargas, que tan solo encajaba un tanto en ese tiempo (3:1).
A partir del tiempo muerto, intercambio de goles de ambos conjuntos, con un gran portero checo que secaba a David Balaguer. En el minuto quince, saltaba a la pista Ferrán Solé que batía desde el extremo al portero haciendo gala de su calidad.
Valero Rivera, ponía el 8:4 en el ecuador de la primera mitad, doblegando a Republica Checa que se encontraría con tan solo 5 jugadores de campo tras dos exclusiones. Las pérdidas de balón marcarían el partido y es que, los Hispanos, tan solo perdían un balón en los primeros 18 minutos ante las nueve pérdidas del combinado checo.
Los últimos diez minutos de la primera parte tenían acento español, con un Joan Cañellas en estado de gracia acompañado de Alex Dujshebaev que hacía un gran papel desde el lateral. Los Hispanos se iban al vestuario con una renta de 7 goles y haciendo gala de una gran actitud defensiva (16:9).
La reanudación iba a traer consigo un escenario similar sobre el 40x20 del Arena Varazdin, con Rodrigo Corrales bajo palos y un Ferrán Solé desatado, que penetraba una y otra vez la portería rival.
A los diez minutos de la segunda parte, el entrenador checo detenía nuevamente el tiempo en un intento desesperado de contener lo que ya era un recital de balonmano español.
Doce minutos de sequía en el marcador de la selección de República Checa, eran aprovechados por los nuestros que no bajaban los brazos y seguían ampliando la diferencia.
En el minuto 50, Corrales ya tenía en su haber un 73% de efectividad en portería, desesperando al conjunto rival que no era capaz de introducir un balón en la malla.
Buenas sensaciones tras el primer encuentro de los Hispanos en Croacia, que el lunes se enfrentan a Hungría a las 18:15h, partido que podrá seguirse en directo por Teledeporte. En el debut, la distinción de MVP ha recaído sobre el capitán del equipo, Raúl Entrerríos, que ha sido decisivo en la parte ofensiva del equipo.
ÁNGEL FERNÁNDEZ, PENDIENTE DE VALORACIÓN MÉDICA
El extremo de los Hispanos, Ángel Fernández, ha sufrido un traumatismo indirecto en su rodilla derecha en la segunda parte del encuentro, estando pendiente de valoración por parte del galeno español, Juan José Muñoz Benito.