Las Guerreras Juveniles siguen demostrando su gen competitivo y, por qué no decirlo, su condición de 'matagigantes'. Es cierto que en todo momento se habla de partidos de preparación, que son pruebas... Pero qué pruebas. Primero lo sufrió Dinamarca, cuarta de Europa, perdiendo y empatando en una gran semana en Elda y Elche; ahora ha sido Alemania, subcampeona continental, en su casa, en el Torneo Internacional de Lübeck. La selección española, con una actuación de nuevo sobresaliente, ha sido capaz de derrotar al combinado germano (28:24; 16:13 en el descanso).
Sabedores del poderío físico del rival que tenían en frente, el conjunto de Pablo Perea planteaba una defensa 6:0 con muchas disuasiones y ayudas, capaces de cortocircuitar por completo la ofensiva alemana, una de las más peligrosas del panorama internacional por sus condiciones antropométricas. En labores ofensivas la circulación de balón rápida permitía conseguir situaciones de lanzamiento y gol, destacando Lyndie Tchaptchet con 8 goles y Eider Poles con 7. El resultado: cuatro goles de ventaja en el minuto 12 (8:4) y tiempo muerto del técnico local.
A partir de ahí llegaban las rotaciones y, por supuesto, el intento de remontada de Alemania ante su afición. Sin embargo, en todo momento las Guerreras Juveniles eran capaces de frenar las embestidas rivales y gestionar con eficacia la ventaja obtenida con tanto trabajo en los primeros minutos. Tal era así, que al descanso España se marchaba con una renta importante de tres tantos (16:13).
En la reanudación la defensa 6:0 seguía funcionando, ajustando situaciones de desdoblamiento que fueron la principal arma de las alemanas, y con la propia Poles y Paula Pérez como principales protagonistas de este entramado defensivo español. Alemania seguía intentando por todos los medios remontar la situación, acercándose en varias ocasiones pero nunca lo suficiente como para inquietar a unas Guerreras Juveniles que volvían a dar una lección de madurez y gestión de los momentos claves del partido. Victoria merecida y de mucho prestigio (28:24) para iniciar con las mejores sensaciones posibles este Torneo Internacional de Lübeck.
"Estoy muy contento por estas chicas que no dejan de sorprendernos y ojalá esto siga, hay que tener los pies en el suelo pero el gen competitivo de este equipo nos va a hacer soñar", reconocía en el post-partido Pablo Perea. El seleccionador nacional apuntaba además que "hemos sido capaces, tras salir enchufadas en los primeros minutos, de calmarnos y gestionar el ritmo del partido a la perfección, aguantando los arreones de toda una Alemania, algo que en categorías de base es muy complicado de conseguir".
Fotografía: RFEBM