La Real Federación Española de Balonmano continúa desgranando con la serie de reportajes #GenBalonmano a cada una de las generaciones de jugadores y jugadoras que el balonmano español nos ha ofrecido a lo largo de su historia. Con el balonmano detenido a causa de la COVID-19, este se ha convertido en un momento para hacer retrospectiva y ver de forma pormenorizada los mimbres con los que se ha forjado nuestro deporte y nuestra selección, base esencial para los éxitos en grandes citas internacionales.
Después de descubrir a la Generación 1998-1999 de Hispanos y Guerreras, las últimas en finalizar su ciclo formativo en la base de los Equipos Nacionales, toca descender un escalón en nuestro listado particular. Aquí nos encontramos, de entrada, con un grupo bañado en oro: la Generación 1996-1997 de Hispanos, dirigida por Alberto Suárez en su etapa como Juveniles y por Isidoro Martínez como Junior.
La andadura de esta generación en las grandes citas estivales comenzó de la mejor forma posible: subiéndose al podio. El bronce en el Campeonato de Europa de Polonia 2014 marcó el inicio de cuatro años cuyo balance es, sin duda alguna, difícil de igualar. En aquel torneo, tan solo una Francia con nombres como los de Ludovic Fabregas, Dika Mem, Romain Lagarde o Melvyn Richardson privó a España de luchar por el título.
Desde entonces, la selección española acudió en todas y cada una de sus citas, como mínimo, a la semifinales del torneo. En el Campeonato del Mundo de Rusia 2015, Francia volvía a ser el verdugo que cortaba el sueño dorado Hispano: la posterior derrota ante Islandia alejaba también a España de las medallas, conformándose con un amargo cuarto puesto. Los galos arrasaron en categoría Juvenil... Pero el salto a Junior supuso un punto de inflexión en el cambio de poder.
Aquellos Hispanos Junior harían historia al encadenar dos medallas de oro consecutivas en el Campeonato de Europa de Dinamarca 2016 y en el Campeonato del Mundo de Argelia 2017. Ambas con un componente épico al precisar de prórrogas para decidir sendos partidos, y con un mismo protagonista en las dos finales: Xoan Ledo. El guardameta de Lalín se convirtió en héroe en Kolding con sus paradas y sus goles de portería a portería; y en Argel por su 7 metros detenido a tiempo cumplido a Lasse Møller y su última parada, que dio opción a Daniel Dujshebaev de anotar y otorgar el título a España. Especial si cabe este último entorchado en territorio argelino: por primera vez, el balonmano español alcanzaba la cima mundial en esta categoría, en la antesala además del Campeonato del Mundo de España 2019.
DOS CAMPEONES DE EUROPA... CON LOS HISPANOS
A sus 24 años -o 23 en el caso de los nacidos en 1997-, esta generación está en pleno proceso de proyección y llegada a la órbita de los Hispanos. Dentro de este grupo de jugadores ya son varios los casos de debutantes con la absoluta, algunos de ellos con títulos: Daniel Dujshebaev y Aleix Gómez ya son campeones de Europa, en el caso del pequeño de la saga Dujshebaev por partida doble, pues también estuvo en Croacia 2018.
Sin duda alguna estamos hablando de una generación que se está abriendo paso con fuerza en la selección española. De la mano de Jordi Ribera han debutado en los últimos años hasta 7 jugadores -Xoan Ledo es el octavo, pero debutó con Manolo Cadenas-, destacando Kauldi Odriozola y Antonio Bazán, que con 13 partidos internacionales formaron parte del equipo que se colgó la medalla de bronce en los Juegos Mediterráneos de Tarragona 2018. En total, esta Generación 1996/1997 ha aportado 126 partidos y 284 goles al total histórico de los Hispanos.
ESTRELLAS MUNDIALES CON 24 AÑOS
Además de los ya mencionados Daniel Dujshebaev y Aleix Gómez, cruzando nuestras fronteras nos encontramos con una pléyade de estrellas que, a pesar de su juventud, en algunos casos ya están más que consolidadas en el panorama internacional. Sin abandonar la Liga Sacyr ASOBAL, en el Barça encontramos a Ludovic Fabregas, Dika Mem y, la próxima temporada, a Blaz Janc.
La lista puede ser muy larga, pero en ella nos podemos encontrar pivotes como Artsem Karalek, Marin Sipic, Johannes Golla o Magnus Saugstrup; auténticos cañoneros como Romain Lagarde, Stanislav Kasparek, Nikola Bilyk, Uladzislau Kulesh, Magnus Rød, Filip Taleski, Lukas Nilsson, Franz Semper, Alexandre Cavalcanti, Lasse Møller, Patrik Ligetvari o Kay Smits; grandes centrales como Melvyn Richardson, Tim Suton o Matyas Gyori; o veloces extremos como David Mandic o Arkadiusz Moryto. Nombres más que conocidos en su gran mayoría por los aficionados al balonmano, y que darán mucho que hablar en la próxima década.
Infografía: RFEBM / Fotografía: IHF