La selección española júnior masculina ha logrado una gran victoria ante Suecia por 26:28 (12:9 al descanso), en la lucha por el 5º puesto del Campeonato del Mundo 2011 que se está disputando en Grecia.
Tras el duro revés de ayer al perder con Túnez y quedar apeados de las semifinales del Mundial, el equipo nacional ha vuelto a dar una lección de honestidad, de cohesión y de balonmano, remontando un partido marcado por el aspecto psicológico de dos equipos que podían haber estado luchando por el podio.
Suecia pareció salta a la pista más entera y con el objetivo de devolver la moneda a España tras su victoria en la primera fase. El extremo zurdo Zakrisson asumía la responsabilidad ofensiva de los nórdicos que se plantaban en el minuto 18 con tres arriba en el marcador (7:4), diferencias que mantenían hasta el final del primer tiempo (12:9), gracias al potencial del pivote Nilsson, que como ya ocurriera en el primer partido, con 9 goles fue el máximo anotador del encuentro.
Tras el descanso España endosó un parcial de 0:3 para igualar el choque a 12. Sin gran aportación desde fuera, el seleccionador español Isidoro Martínez transmitió a los jugadores que explotaran otra serie de argumentos ya trabajados para contrarrestar el juego sueco.
Viendo la eficacia del pivote Nilsson, España bajó a la defensa 6:0 mediada la segunda mitad, y esa fue una de las claves de la recuperación, ya que con tres de desventaja en el 18’ (22:19), un parcial de 0:3 igualaba nuevamente el choque a falta de 6 minutos y medio para la conclusión.
Dos acciones consecutivas de Goñi y Álvaro Ruiz ponía a España por encima (23:24) cuando se entraba en los cinco minutos decisivos. Y fue entonces cuando la selección creyó definitivamente en la victoria, recuperando la confianza y sacando lo mejor de sí.
El gol de Víctor Alonso en el 59’ dejaba prácticamente sellada la victoria, 25:27, y aunque Suecia reaccionó y recortó las diferencias a uno merced nuevamente a Nilsson, Juan Castro sentenciaba el definitivo 26:28 a siete segundos de la bocina.
Importante triunfo de España, que deberá ser valorado por la capacidad de superación de un grupo que tuvo que levantarse tras el dolor de ayer, teniendo fe en sí mismos hasta el pitido final.
*Se adjunta acta del partido