Tras un arranque espectacular, endosando un parcial de 0:4, cimentando en una poderosa defensa 6:0, los de Valero han visto como se diluía la ventaja, hasta llegar al minuto 19, momento que Strazdas lograba igualar el partido a 8.
Los tres lanzamientos de 7 metros malogrados (1 de 4), y las 13 paradas de Vaskevicius, han imposibilitado que España pudiera romper el partido.
Los lituanos, más asentados a partir del ecuador de la primera mitad, se ponían por delante en el 18’40”, y pese a que esa ventaja fue efímera, ya que en la acción siguiente, Ugalde volvía a poner las tablas, comenzaron a dominar el choque.
Las pérdidas en ataque y los espacios en los 6 metros de la defensa española, devolvieron la fe a unos lituanos, que sin grandes alardes, han alcanzado el descanso por delante en el marcador (12:11), merced al único gol de su estrella Novickis.
Por España destacar el trabajo de Andreu en el pivote, que además de marcar tres goles, provocó dos penaltis, y el tándem Entrerríos-Ugalde, dos goles cada uno, si bien ambos entraron poco en juego.