La batalla contra el COVID-19 sigue su curso, y las personas que trabajan en el sector sanitario español están en primera línea para contener el avance del virus. Pronto, eso sí, todos ellos van a contar con un 'fichaje' de lujo en esta pugna: se trata de Begoña Fernández, una de las Guerreras más icónicas de la historia, que apura sus últimos días de baja maternal antes de regresar a su puesto de trabajo como auxiliar de enfermería en un centro hospitalario de Vigo.
Elegida 'Mejor Pivote' en el Campeonato de Europa de balonmano femenino de 2008, Begoña Fernández hacía pública su retirada de las pistas en el verano de 2015 con 181 partidos internacionales a sus espaldas y un enorme palmarés, en el que destaca, sin lugar a dudas, su medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de Londres 2012. Desde su marcha, la viguesa ha permanecido ligada al sector sanitario, pero en los últimos meses ha estado de baja al haber sido madre por segunda vez, y eso le ha provocado un gran "conflicto interno" porque, "en condiciones normales, tendría que estar en el hospital trabajando, pero fui madre otra vez y esto me hace ver los toros desde la barrera, me hace sentirme mal porque me gustaría estar ahí".
Asegura que "es una profesión vocacional, lo llevas dentro, es gratificante poder ayudar a las personas en sus situaciones más vulnerables", y apunta que "debemos sacar el lado positivo de todo esto, y eso es la generosidad de la gente: hablo con mis compañeros cada día, y es increíble el cariño que recibe, como cada uno dentro de sus posibilidades intenta aportar lo que máximo. Hoy, más que nunca, me siento súper orgullosa de formar parte del sector sanitario".
Begoña Fernández, que durante años fue un pilar fundamental en aquel mítico equipo de Guerreras dirigido por Jorge Dueñas, agradece su labor a "todo el personal sanitario, a todo el mundo que está trabajando a día de hoy para facilitarnos las cosas; la familia del balonmano está acostumbrada a jugar partidos importantes, el balonmano nos ha dado muchos valores y herramientas para saber trabajar bajo presión, gestionar las emociones, y estar fuertes en momentos complicados".