Con la División de Honor Plata Masculina al rojo vivo tras la disputa de la Jornada 9, regresa una semana más la sección 'Hablando en Plata', que en esta ocasión alcanza su quinta entrega. Esta semana realizamos un largo viaje para llegar hasta las Islas Canarias, concretamente hasta Arrecife, capital de la isla de Lanzarote. Allí, en las filas del recién ascendido Ca'Mario Lanzarote, juega Alberto Molina, un central que ha decidido dar a su vida personal y profesional un giro de 180 grados: dejar el frío de León, su ciudad natal, por el buen tiempo de las islas, a casi 2000 kilómetros de distancia.
UN TROTAMUNDOS DEL BALONMANO ESPAÑOL
El equipo lanzaroteño debutaba esta temporada en la categoría de plata del balonmano español, después de quedar segundo en su fase de ascenso de Primera Nacional. A pesar de no lograr el ascenso en esa promoción, una cesión de derechos deportivos con el KH-7 Granollers propiciaba que el conjunto canario pudiese estar por primera vez en la División de Honor Plata Masculina. En su empeño por alcanzar la permanencia en esta primera experiencia, el Ca' Mario Lanzarote decidía optar por un técnico con experiencia en Liga Loterías ASOBAL para llevar las riendas del banquillo: el catalán Jordi Lluelles, que pasó varios años como segundo en el Villa de Aranda.
A nivel de plantilla, los insulares se han reforzado con varios jugadores con experiencia en la categoría e incluso en Liga Loterías ASOBAL, confeccionando un grupo completo y lo suficientemente potente como para luchar por el objetivo de mantenerse en la División de Honor Plata Masculina. Nombres como los de Nicolás López Rey, Javi García o el chileno Diego Reyes, además del ya citado Alberto Molina llegaban a Lanzarote para apuntalar un equipo que quiere hacer bien las cosas desde el principio en su nueva aventura.
El caso de nuestro protagonista en el día de hoy es especial. A sus 24 años, el central formado en la cantera del Ademar León ya ha defendido la camiseta de otros tres equipos, todos ellos en División de Honor Plata Masculina: primero fichó por el MMT Seguros Zamora; la temporada siguiente jugó en Gijón Jovellanos, aunque una lesión de rodilla le apartó de las pistas durante varios meses, en un curso aciago por el descenso de los asturianos a Primera Nacional; y, tras vivir estas dos experiencias relativamente cerca de su hogar, Alberto Molina ha decidido hacer las maletas y fichar por el Ca' Mario Lanzarote para ser una pieza clave en el centro del ataque canario.
"Tenía alguna oferta más pero aquí ya habían firmado amigos y ex compañeros en otros equipos, como Javi García o Diego Reyes"
El propio Alberto Molina explica que todos estos cambios se deben a que "en cada club he querido coger lo mejor de todos, de cada entrenador y de cada jugador, para coger experiencia, algo clave en alguien de mi edad". El central del Ca'Mario Lanzarote se muestra "muy agradecido por la oportunidad que me han dado en los clubes que he estado", y argumenta su decisión de fichar por el conjunto lanzaroteño en que "había un proyecto muy bueno, profesional, como bien me contó Jordi Lluelles; tenía alguna oferta más pero aquí ya habían firmado amigos y ex compañeros en otros equipos, como Javi García o Diego Reyes, y eso sumado al ritmo de entrenamientos y al nivel de vida aquí me ayudó a tomar este tren".
El jugador leonés llega a las islas después de sufrir la lesión más grave de su carrera deportiva, una lesión de ligamento cruzado anterior que le impidió ayudar en la permanencia del Gijón Jovellanos. Sin embargo, esto no le frena, ya que "a partir de la lesión ha sido cuando más he madurado, he aprendido a valorar más los pequeños detalles, ir a entrenar, los viajes, los partidos...". Además, agradece a compañeros y amigos como "Carlos Ruesga, Pablo Cacheda o Mario López, entre otros, que me ayudaron durante mi recuperación ya que ellos también han pasado por esta lesión y han vuelto a jugar a muy buen nivel".
Alberto Molina quedó muy sorprendido cuando llegó a Arrecife y observó el ambiente que se vivía cuando había balonmano. A pesar de venir de León, "donde el balonmano es una religión, en Lanzarote hay muchos aficionados que llenan casi siempre Titerroy, haciendo de nuestro pabellón una caldera". Además, aplaude que los seguidores en la isla "también apoyen al balonmano femenino; aquí quien viene a ver al Ca' Mario Lanzarote después va también a ver al Lanzarote Puerto del Carmen o al Zonzamas".
"Está todo tan igualado que en dos partidos te puedes meter en fase de ascenso o en plazas de descenso"
OBJETIVO PERMANENCIA
Con nueve jornadas disputadas, el Ca' Mario Lanzarote se encuentra en la novena plaza de la División de Honor Plata Masculina, acumulando cuatro victorias, un empate y cuatro derrotas. Una buena actuación en este primer tramo de temporada si se tiene en cuenta que los lanzaroteños debutan en la categoría, pero observando la tabla clasificatoria, tienen a tan solo tres puntos por debajo los puestos de descenso, y a dos por encima las plazas de play-off de ascenso a la Liga Loterías ASOBAL.
En su tercera temporada en la categoría de plata, Alberto Molina se sorprende de "la tremenda igualdad que hay este año, está todo tan igualado que en dos partidos te puedes meter en fase de ascenso o en plazas de descenso; sin duda, alguna la liga más equilibrada que recuerdo". El jugador leonés asegura que "no hay ninguna plantilla que sobresalga demasiado sobre el resto, pero hay muy buenos equipos que han sorprendido, como Alcobendas, Agustinos o Los Dólmenes".
El central del conjunto lanzaroteño se atreve incluso a apostar por algunos equipos, aunque primero advierte que "en esta categoría es vital sacar los máximos puntos posibles en casa, porque fuera es muy complicado". Partiendo de esta premisa, y teniendo en cuenta que "está todo completamente abierto tanto arriba como abajo", Alberto Molina ve a "Nava, Alcobendas, Aranda, Antequera y Ciudad Real luchando por el ascenso; y por abajo un grupo de equipos en el que podemos estar nosotros con Bordils, iKasa o Palma del Río".
ALMA DE JUNIOR DE ORO
Alberto Molina no solo cuenta con una amplia trayectoria a nivel de clubes, también puede presumir de haber jugado como promesas, como juvenil y como junior en las categorías inferiores de la selección española. Gracias a aquellos años, el central leonés tiene el privilegio de contar con un palmarés a la altura de muy pocos: tres platas -Campeonato de Europa Juvenil Montenegro 2010, Campeonato del Mundo Juvenil Mar del Plata 2011 y Campeonato del Mundo Junior Bosnia 2013- y un oro -Campeonato de Europa Junior Turquía 2012-.
"Si tengo que elegir entre mi generación y la actual, me quedaría con la mía, los resultados así lo avalan"
El jugador leonés recuerda con mucha nostalgia esa etapa de su vida, "fueron unos años increíbles, lo echo mucho de menos". Haciendo memoria, Alberto Molina explica que "estando en León, yo estaba deseando irme una semana o dos para concentrarme con mis compañeros, y eso hace ver lo unido que estaba este grupo y todo lo que llegó a conseguir".
Los Juniors de Oro, como se acabó apodando a esta prolífica generación, compite ahora por ese honor con la que ha ganado en dos veranos el Campeonato de Europa y el Campeonato del Mundo en categoría junior. Alberto Molina no tiene dudas al respecto: "Si tengo que elegir entre mi generación y la actual, me quedaría con la mía, los resultados así lo avalan; además, creo que muchos jugadores han triunfado ya en España". A pesar de ello, el leonés reconoce que "están saliendo grandes jugadores como Aleix Gómez, Dani Dujshebaev o José María Márquez, pero estas temporadas serán muy importantes para ver cuál puede ser su progresión final".
Sin embargo, la diferencia que sí nota Alberto Molina está en las oportunidades que se están dando a esta generación para debutar con los Hispanos, algo que "nosotros casi nunca tuvimos, salvo contadas excepciones como las de Álex Dujshebaev, Ferran Solé, Alejandro Costoya y Aitor Ariño; ahora ya hemos visto debutar a cuatro o cinco jugadores de 21 años con la absoluta, algo que por cierto es un gran síntoma para el balonmano español".
"Me encantaría volver en unos años al Ademar, estar en ASOBAL y jugar Champions en tu casa sería muy bonito"
Sin duda alguna, Alberto Molina ha disfrutado, a su corta edad, de una carrera deportiva exitosa, sin obviar las piedras que siempre se pueden presentar en el camino. En León, Zamora, Gijón y ahora en Lanzarote han disfrutado y disfrutan de un central con gran calidad. A pesar de haber vivido ya varias experiencias, el hogar siempre está en el corazón del leonés, que reconoce que "me encantaría volver en unos años al Ademar, estar en ASOBAL y jugar Champions en tu casa sería muy bonito".
