El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha elogiado hoy la "dimensión ética" del deporte, basado en el juego limpio, y ha subrayado los valores del diálogo y el entendimiento propios del olimpismo.
En la presentación del programa ADO para los Juegos de Londres 2012, Zapatero ha recordado cómo José Ortega y Gasset sostenía que todas las obras humanas tienen algo de deportivas y ha destacado la importancia de luchar contra las limitaciones de uno mismo y no contra el adversario.
Tras recordar el medallero conseguido en Pekín y los éxitos de la selección de fútbol, del ciclismo y del tenis español, ha asegurado que los deportistas "siguen nutriendo la imagen de España y proyectándola en la esfera internacional".
Se ha mostrado así convencido de que "el magnífico presente es el preludio de un futuro aún más prometedor", agradeciendo a las empresas patrocinadoras que mantengan su compromiso con el deporte español para seguir cosechando éxitos en Londres 2012.
Desde que en 1988 se puso en marcha el programa ADO, de cara a los Juegos de Barcelona, el incremento progresivo de los recursos y de los medios ha situado a España "en los primeros puestos del deporte mundial", ha recordado Zapatero, que no ha hecho en su discurso ninguna referencia a un posible nuevo Ministerio de Deportes.
Para el presidente, “los deportistas son unos espléndidos embajadores de la España actual y moderna y contribuyen a devolver a los ciudadanos la mejor imagen de sí mismos”.
"El deporte es uno de las principales columnas cívicas", ha manifestado el presidente del Gobierno, quien ha insistido también en su importancia a la hora de fomentar la igualdad y reforzar "el sentimiento común de ciudadanía".
En su opinión, como un país puede verse reconocido en el esfuerzo de sus deportistas, es obligación del Gobierno apoyarlos de manera constante y, al tiempo, agradecer su esfuerzo y su sacrificio.
A lo largo de su discurso ha hecho referencia a los éxitos logrados en diversas modalidades deportivas y se ha detenido en la natación sincronizada, ya que, a su juicio, ninguna disciplina olímpica muestra tanta belleza y tiene tras de sí tanto esfuerzo.
A la conclusión del acto, José Luis Rodríguez Zapatero despachó de forma amistosa con el presidente de la R.F.E.BM., Juan de Dios Román.