El talante de Antonio, legendario presidente del Comité Técnico de Árbitros de Las Palmas, ha sido el germen de una brillante estirpe de árbitros, culminada con la llegada a la elite de Óscar Raluy y Ángel Sabroso. A modo de anécdota, destacar dos hechos históricos protagonizados por Antonio: el primer árbitro canario en pitar un partido en territorio peninsular, y el primer árbitro canario en estar presente en un partido de balonmano televisado en las Islas Canarias.
Los restos mortales de Antonio descansan en el Tanatorio de San Miguel (C/Aldea Blanca, 3 – Las Palmas de Gran Canaria), a la espera de ser incinerado en el día de hoy, a las 20:00 h.
El presidente de la Real Federación Española de Balonmano, Juan de Dios Román, junto con todos los directivos y el personal federativo, desea transmitir un sentido pésame a la familia y amigos de Antonio J. Díaz Rodríguez, y a toda la familia del balonmano canario.