La Sala Pereda del Palacio de Festivales de Cantabria acogía en la tarde de ayer la 57 Gala del Balonmano de Cantabria organizada por la Federación Cántabra de Balonmano, un acto que se volvía a celebrar tres años más tarde –parón motivado por la pandemia de COVID– y que servía para rendir homenaje a destacados deportistas, clubes y entidades vinculados con el balonmano cántabro.
Francisco V. Blázquez, presidente de la Real Federación Española de Balonmano, acudía a la cita junto a tres notables representantes de los Hispanos: por un lado, el seleccionador nacional, Jordi Ribera; y por otra parte, los hermanos Dujshebaev, Álex y Dani. Además de ellos, su padre, el mítico Talant Dujshebaev, y destacados representantes del mundo político como José Antonio Revilla, Francisco Javier López Marcano, Mario Iglesias, Gema Igual o Gloria Gómez.
El presidente de la Federación Cántabra de Balonmano, José Manuel Barquín, hizo entrega a todos ellos de la Insignia de Oro del ente federativo por su impulso y apoyo al balonmano cántabro desde distintos frentes: ya sea en la pista, desde el banquillo o en los despachos.
Además, el propio José Manuel Barquín reconocía que «este momento es muy especial, subir aquí y ver las caras de la gente que nos acompaña hoy, después de tres años; la familia del balonmano cántabro nos volvemos a juntar para celebrar los incontables éxitos que hemos sumado en este tiempo«. Y es que Cantabria «vive un auge en lo que respecta a la acogida de eventos de primer nivel, lo que ha hecho que nuestra región brille tanto dentro como fuera de las pistas«.
